domingo, 1 de junio de 2008

EL FUTSAL: UN DEPORTE CON UNA IDENTIDAD INNEGABLE


El fútbol de salón tiene una dilatada trayectoria. Comenzó a principios de la década del 30 en Montevideo, Uruguay, como una genial concepción del profesor Juan Carlos Ceriani. Se organizó y constituyó su primer organismo continental (la Confederación Sudamericana de Fútbol de Salón) en otra ciudad de la América Meridional, Asunción del Paraguay.
En diciembre de 2002, nuevamente la capital guaraní, fue teatro del cónclave de la dirigencia internacional de todo el planeta, que se reunió bajo el impulso de la Confederación Panamericana de Fútbol de Salón (PANAFUTSAL), celosa defensora de la independencia de esta modalidad, para dar renovados y más felices rumbos a este deporte, constituyendo la Asociación Mundial de Futsal.
Esta organización, presidida por el dirigente paraguayo, Dr. Rolando Alarcón Ríos, constituida sobre la base de todos los países de América que practican el futsal, más naciones de otros continentes, de ahora en más, pasa a ser el ente regulador y núcleo de expansión de la disciplina hacia todos los rincones del planeta.
El acta de constitución de la AMF ha sido subscripta por representantes de 24 países, que eligieron su primera directiva y dispusieron el calendario de competiciones para el año 2003, dando continuidad a los diversos torneos a nivel mundial y continental ya existentes, creando asimismo nuevas competiciones en otras categorías.
El fútbol de salón recoge hoy los frutos de una cultura deportiva floreciente, como un hecho natural e irreversible, independiente y con peculiaridades bien distintivas, por lo que en Madrid en 1985 se decidió utilizar un vocablo identificador que fusione los dos que lo compone, conociéndosele desde entonces como futsal.ANTECEDENTES DE UNA INNEGABLE IDENTIDAD
El futbol de salón, tuvo un incontenible desarrollo a partir de la segunda mitad de la anterior centuria en Sudamerica.
La identidad e independencia de esta disciplina por origen, crecimiento y evolución, nada tiene que ver con el futbol de campo. El ejemplo más facil para trazar una comparación bien simple, es el del tenis y el tenis de mesa, con la diferencia de tratamiento que salta a la vista, pues mientras la ITF (Federación Internacional de Tenis) jamás se inmiscuyó con el tenis de mesa, la FIFA, especialmente desde comienzos de los años ochenta cuando el futbol de salón llegó a tal adultez, rganizó su primer mundial en el año 1982 en San Pablo y en forma abierta, mezquina y no velada trató de apropiarse de esta disciplina.
La intemperancia se hizo cada vez más fuerte, en la medida en que la ya conformada FIFUSA (Federación Internacional de Futbol de Salón), por entonces presidida por el brasileño Januario D'Alessio Netto crecía cada vez más, al punto de montar en 1985 su segundo mundial en España, la FIFA no lograba todavía promover un torneo de su deporte de laboratorio llamado futbol 5, burda copia del futbol de salón.
El fútbol de salón recogia los frutos de una cultura deportiva floreciente, como un hecho natural e irreversible. El futbol pretendía imponer un híbrido, un robot deportivo artificial. En su impotencia por lograrlo apeló a esfuerzos económicos, presiones y actitudes "non sanctas" de todo tipo y antipáticas determinaciones como la prohibición de utilizar la palabra futbol, lo que motivó la creación en el congreso de FIFUSA de Madrid de 1985 de la palabra compuesta "fut-sal" para desde entonces llamar así al futbol de salón.
Tiempo después la FIFA se apropió tambien de esa palabra. Paraguay, defensor tradicional de la autonomía innegociable de esta disciplina, usa el futsal para identificar a este deporte por derecho adquirido y protegido por las leyes de la nación, al haber inscripto ese vocablo en los registros oficiales de la República, por lo que a la otra disciplina se le conoce como fútbol 5 y quienes la llaman con la partícula futsal se cuidan de usar el agregado FIFA.
Las dos modalidades coexistieron hasta nuestros días, con vaivenes de relacionamiento que produjeron circunstanciales acercamientos y distanciamientos y etapas de indiferente gestión independiente sin nuevas interferencias.
Escindido de FIFUSA, países miembros de la PANAFUTSAL, se reunieron con representantes de FIFA en Guatemala. Ese mismo año, se acercó la posibilidad de una negociación. El grupo de países de América, jamás se cerró en una caparazón absolutista, como fue la actitud de FIFA en reiteradas épocas. Pero con firmeza tampoco claudicó en su postura de INDEPENDENCIA. Negociación franca y razonada si, entrega ciega no, fue la premisa.
Se llegó así a este punto en el que, no alcanzando un acuerdo que no lesione los intereses de esta disciplina y de PANAFUTSAL, este organismo, enarbolando la bandera de la autonomía del futbol de salón y de la defensa de sus genuinos intereses, se aparta del expureo gobierno de FIFUSA y al no prestarse a una entrega a FIFA, decide constituir la ASOCIACION MUNDIAL DE FUTBOL DE SALON (AMF).