viernes, 18 de julio de 2008

¡Chuquisaca campeón!

Tuvieron que transcurrir cuatro largos años para que Chuquisaca se adjudique el título del campeonato nacional de fútbol de salón, categoría mayor, tras lidiar y ganar un reñido partido a Oruro, por 7-3, anoche ante una buena asistencia de público que asistió al coliseo cerrado JRA.Chuquisaca se alzó con méritos el primer puesto de la XXXIII del certamen más importante del salonismo boliviano, reeditando así la hazaña lograda en la final contra Cochabamba el año 2004 en Potosí.El encuentro fue dirigido por el tarijeño Marco Uriburo y el cruceño Justo Franco, los que cerca del final perdieron el control de las acciones, en ese afán, los orureños se retiraron del campo de juego faltando 29 segundos para que finalice el partido, argumentado falta de garantías por la presión del aficionado desde las graderías. José Alberto Marañón (2), Rayner Daza (2), Richard Arancibia (1) y Enrique Montoya (2) anotaron para Chuquisaca, mientras que Marco Antonio Sandoval (1), Vladimir Cáceres (1) y Wilfredo Saavedra marcaron para Oruro. En el primer tiempo, los chuquisaqueños empezaron a atacar sin ninguna piedad, aunque las genialidades individuales de nada les sirvieron ya que se fueron al descanso con una diferencia mínima de 2-1. Marañón (5 m.) y Daza (13 m.) se adelantaron en el marcador y Sandoval (16 m.) anotó el transitorio.En el segundo tiempo, el equipo anfitrión trató de bailar a un aguerrido cuadro orureño. Chuquisaca mostró un mejor juego, con toques cortos y remates de corta y larga distancia que inquietaron a Marco Antonio Siles.Las cifras no se movían y Oruro emparejó con un disparo de Cáceres (30 m.) tras una complicidad con Roberto Mercado, lo que causó zozobra en el fortín capitalino y la reacción fue inmediata, al minuto Daza (31 m.) adelantó el marcador con zapatazo desde media cancha. La recuperación no se dejó esperar y Saavedra (35 m.) recibió un perfecto pase de Jesús Reynaldo Saavedra, el mejor de la visita, para emparejar el pleito.A partir de ese momento cambió la historia. Los capitalinos empezaron a atacar sin piedad alguna y los últimos cuatro goles llegaron en menos de tres minutos. Marañón (36 m.), Arancibia (37 m.) y Montoya (38 m. y 39 m.) consolidaron la gran victoria.
LOS PROTAGONISTASFrancisco Candia * DT. Chuquisaca: "Trabajamos para esto, aunque la gente mucha gente se opuso a este proyecto, trabajamos en contra la adversidad, no tuvimos mucho a poyo, no teníamos cancha y aun así lo hicimos de la mejor forma. Ahora somos campeones".Enrique Montoya * Chuquisaca: "Somos nuevamente somos campeones, creo que la voluntad, la humildad y sobre todo las ganas hicieron que saquemos un partido a flote, dimos un buen espectáculo y las cosas se nos dieron. Se lo dedicamos a toda la gente".José Alberto Marañón * Chuqiisaca: "Dejamos todo en la cancha, vieron que sí se podía y ahora conseguimos el título. Es una época increíble mi vida fútbol de salón, salí campeón en todo lo que yo quise, la verdad tuve buenos compañeros en todos los grupos que integré".
LA OTRA MIRADA
Banda de músicosLa banda del Comando de la Policía Departamental animó la noche de viernes. Los músicos se apostaron en la tribuna que colinda a la calle José Komareck.
Chocolatín y los niñosEl payaso Chocolatín y una veintena de niñas y niños alentaron a la selección chuquisaqueña. A la fiesta se sumó a su estilo el popular "lobito".
Un lleno completoDespués de mucho tiempo el coliseo cerrado estuvo repleto de espectadores. La última vez fue cuando CIDEPRO organizó el primer campeonato interprovincial de residentes en Sucre.
Capitanes con el 10Los capitanes de las selecciones que disputaron el partido final llevaron en la espalda el número 10. José Alberto Marañón (Chuquisaca) y Jesús Reynaldo Saavedra (Oruro), sin duda fueron los mejores de la cancha.
Olas y cánticosLas olas mexicanas y los estribillos en defensa de la Captalidad le dieron el realce a la fiesta salonista.
La alcaldesaLa alcaldesa Aydeé Nava y el concejal Edwin Zegarra estuvieron presentes en el espectáculo, ambas autoridades no se hicieron ningún problema de compartir las graderías con los más frenéticos al salonismo.
(Correo del Sur)